RUINA O INDEPENDENCIA: LA CARA OCULTA

¿Cómo sería una Cataluña independiente?

Es una pregunta muy común a la que los separatistas te contestarían sin pensarlo que sería la Reina en una partida de ajedrez pero en realidad sería un rey en una situación de jaque mate, te lo explicamos.

Los principales políticos catalanes nos hacen entender que Cataluña es rica de por sí, que España les roba, que el déficit fiscal con el conjunto de España destruye a 250.000 empleados, que en una Cataluña independiente la electricidad sería un 60% más barata, que se crearían 70.000 puestos de trabajo público. En realidad todo es más que palabrería los datos y ejemplos en otros países nos lo explican claramente, desarmamos los deseos catalanes en unos párrafos.

Debido al cumulo de datos aportados os dejaré claros y explícitos en el artículo los enlaces en los cuáles pueden encontrar todos y cada uno de los datos.

Comercio Exterior: INE y Estadísticas de aduanas

Comercio resto España: INE

Deuda pública y privada: Banco de España, Contabilidad Nacional

Fuga de capitales: Credit Suise, HSBC, Citigroup, UBS

Balanzas fiscales: Ministerio de Hacienda

Cataluña independiente perdería un tercio de su Producto Interior Bruto, entraría en suspensión de pagos por el volumen de deuda pública y los jubilados que en 2017 eran de 1,68 millones perderían el 20% de sus pensiones. Podemos ver cifras reales que los separatistas nos ocultan, ¿qué pasaría con la balanza comercial catalana? En 2016 las exportaciones eran de 65.160 millones de euros y las importaciones de 78.344 millones de euros por lo que se encontraba en una situación de déficit exterior de 13.184 millones que es el 6,3% del Producto Interior Bruto. Si Cataluña rompiera con España saldría de la Unión Europea, ¿qué pasará si Cataluña es expulsado de la Unión Europea? Miremoslo con el ejemplo del Brexit, las pérdidas de la economía británica han sido del 3% del PIB, Cataluña sufriría lo mismo o incluso más teniendo en cuenta la gran influencia de Reino Unido.

La parte fundamental de sus exportaciones vienen de sus grandes multinacionales de alimentación y farmacia que colocan en el resto de España, entre el 50-80% de sus ventas. Con la independencia repetimos sería inmediata la salida de la Unión Europea y consigo del euro lo que haría que esos productos se agravaran con aranceles algo que haría estos más caros y menos atractivos, ese mercado de 45 millones de españoles se reduciría a un mercado de 7,5 millones de catalanes. Estas multinacionales de farmacia y alimentación abandonarían la región y provocaría una disminución de 6000 millones de euros solo con la salida de estas dos, si aplicamos al resto de sectores la pérdida que ha supuesto en Gran Bretaña el Brexit nos saldrían otros 4000 millones de euros, que nos llevaría a una pérdida de 10.000 millones de euros, una disminución del PIB catalán en un 4,8% y 180.000 empleos. También afectaría a la balanza comercial con el resto de España ya que Cataluña gana con esto mucho dinero, de los veinte principales mercados de Cataluña once son regiones españolas, vende en Aragón más de lo que exporta a Francia o Alemania y vende a Andalucía más que a Italia. En 2016 las ventas de Cataluña al resto de España 61.000 millones de euros constituía el 29% de la riqueza catalana y las ventas del resto de España a Cataluña eran de 42.000 millones de euros por lo que se encontraba en una situación de superávit fiscal de 19.000 millones de euros pero este superávit desaparecerá ya que Cataluña no produce nada que no se pueda producir en el resto de España.

Veamos lo ocurrido en los procesos de secesión que han tenido lugar en Europa por un lado tenemos los amistosos de la República Checa y Eslovaquia (Divorcio de terciopelo) en el que las relaciones comerciales disminuyeron en un 75% y el proceso de secesión no amistoso de Los Balcanes que afectó a un 90% de las relaciones comerciales. Por lo que en cualquiera de los casos Cataluña perdería nada menos que el 21% del PIB catalán si fuera amistoso y el 26% si se hiciera por las malas. Veamos a continuación lo que pasaría con la deuda pública y con la deuda privada:

-Deuda pública: La deuda pública real de España en 2017 era de 1,54 billones de euros y la deuda total se ha repartido en función del PIB que sería 291.000 millones de euros o en función del PIB per capita que sería de 347 millones, es decir el 135% o 161% de su PIB. Los separatistas dicen que no pagarían nada al Estado español, según la delirante afirmación del presidente del CCN España se tendría que comer estas deudas con patatas, pero esto es totalmente falso ya que en todas las separaciones europeas ha regido el principio de sucesión de deudas, según el Derecho Internacional los acreedores tienen como garantía jurídica el territorio por lo que es imposible rechazar la responsabilidad de responder en la deuda del Estado como pretenden ellos. Además si se negaran a pagarla, Cataluña sería excluida de todos los mercados financieros y se le embargarían todos los bienes que fuera posible y Cataluña entraría en una situación de suspensión de pagos.

-Deuda privada: Las empresas catalanas debían en 2017 unos 321.000 millones de euros y las familias 102.000 millones, Cataluña independiente del euro según la Comisión Europea ese dinero entonces se sometería a una devaluación. Con la crisis de Grecia los bancos suizos hicieron cálculos sobre que pasaría si Grecia volviera al Dracma, la conclusión fue que en dos años el Dracma se devaluaría frente al euro en un 50%, supongamos que Cataluña abandona el euro y crea una moneda propia, si tan solo se devaluase en un 30%, la deuda pública pasaría a estar entre el 175-209% del PIB,  para empresas y familias , esto sería la ruina. Si la viabilidad de un país se cuestiona los flujos de capital son el mayor elemento de incertidumbre, debido a que Cataluña no tiene recursos propios como Escocia se llevaría a cabo una gran fuga de capitales. El control de capitales sería inevitable e inmediato, nadie querría prestarle dinero a Cataluña y ni siquiera podría acudir al Banco Central Europeo. Una Cataluña independiente sería una Cataluña arruinada y le implantarían el corralito al día siguiente.

Dejando a parte el supuesto, ya son cientos las empresas que han llevado a cabo una fuga de Cataluña debido al miedo de que en caso de independecia estas situaciones relatadas en este artículo se lleven a cabo de forma inmediata.